Este texto es una traducción del documento 10 pillars of the Green New Deal for Europe, publicado en julio por el grupo Green New Deal for Europe, en el que participan desde DIEM25 al colectivo Autonomy, pasando por la New Economics Foundation y Common Wealth. Hemos decidido traducirlo como introducción a lo que es el documento de trabajo completo del grupo. Pese a que esta introducción no hace justicia a la ambición y complejidad del plan completo, e incluso contiene apreciaciones con las que no estamos en absoluto de acuerdo, consideramos que es una aportación interesante al debate en curso sobre el Green New Deal, y el primer intento serio de un plan de transición ecológica europeo no basado en la primacía del mercado.

Las elecciones al Parlamento Europeo otorgaron un mandato claro a los eurodiputados entrantes: hacer frente a las emergencias climáticas y ecológicas. Millones de personas salieron a las calles de Europa para exigir una transición justa, y millones más votaron a favor. Los líderes europeos tienen ahora una oportunidad histórica de presentar un plan ambicioso y pragmático para transformar Europa mediante una transición a las energías renovables, y la obligación histórica de hacer esto realidad.

En Europa, al igual que en los Estados Unidos, este plan se conoce con el nombre de “Green New Deal”. Y en vísperas de las elecciones al Parlamento Europeo, varios partidos europeos expresaron su apoyo a su implementación. Pero, como AOC señala, no todas las políticas ambientales cuentan como un “Green New Deal”. Para merecerse este nombre, las políticas ambientales deben consistir en algo más que impuestos y retoques: deben ser transformadoras, y crear la economía más próspera, más justa y más sostenible que hayamos visto.

Ahora que el nuevo Parlamento Europeo se prepara para tomar posesión de su escaño, una advertencia: un Green New Deal debe estar a la altura de los siguientes 10 pilares básicos, o en absoluto será un Green New Deal.

1) HACER FRENTE A LA MAGNITUD DEL DESAFÍO

La ciencia es clara: debemos limitar el aumento de la temperatura global a 1.5 grados y revertir el colapso de nuestros sistemas naturales, o nos arriesgamos a perderlo todo.

El Green New Deal para Europa responde a la magnitud de este desafío, invirtiendo al menos el 5% del PIB de Europa cada año en la transición hacia las energías renovables, la reversión de la pérdida de biodiversidad y otros problemas medioambientales, y la prosperidad compartida de todos los residentes europeos.

Construirá una economía que permita a Europa florecer respetando los límites planetarios, restaurando los hábitats naturales, la limpieza del aire y la salud del suelo en todo nuestro continente.

En respuesta a la Gran Depresión de 1933, Franklin D. Roosevelt reconoció la necesidad de ir más allá de las reformas a pequeña escala para iniciar una transformación radical del sistema económico estadounidense.

El Green New Deal para Europa trae esta ambición al otro lado del Atlántico y al siglo XXI. No solo  pide una reducción de las emisiones de carbono. Exige una transformación a gran escala de nuestros sistemas de producción, consumo y relaciones sociales: la reconfiguración de nuestros sistemas de producción de materiales: reciclaje, reutilización, reparación y cuidado. Nada menos ambicioso que este plan merecerá el nombre de Green New Deal.

2) PONER LOS RECURSOS INACTIVOS AL SERVICIO DE LO PÚBLICO

El Green New Deal hace un llamamiento a las instituciones públicas para que impulsen la transformación económica y social con el fin de hacer frente a las crisis climática y medioambiental.

Al igual que los Estados Unidos hace un siglo, Europa está atrapada en un largo período de inestabilidad económica. Incluso en economías prósperas como Alemania, la precariedad está aumentando y los hogares están luchando por encontrar un lugar productivo para invertir sus ahorros.

El Green New Deal da una respuesta a esto.

Al igual que para el New Deal original, su premisa proviene del trabajo del economista John Maynard Keynes, quien demostró que un estímulo fiscal puede guiar la recuperación económica.

La propuesta pide al Banco Europeo de Inversiones que proporcione este estímulo mediante la emisión de bonos verdes que puedan proporcionar un rendimiento a los ahorradores europeos en dificultades.

En otras palabras, el Green New Deal pone los recursos inactivos de Europa hacia el servicio público, sin poner la carga de la transición sobre las espaldas de los europeos de a pie.

3) EMPODERAR A LOS CIUDADANOS Y A SUS COMUNIDADES

La transición verde de Europa no hará de arriba hacia abajo. Debe empoderar a los ciudadanos y a sus comunidades para que tomen las decisiones que conformarán su futuro.

El Green New Deal tiene la democracia en sus cimientos. Proporciona mecanismos claros para que las asambleas de ciudadanos y los gobiernos locales tomen decisiones significativas sobre el desarrollo de sus comunidades, municipios y regiones. Y garantiza que, siempre que sea posible, los nuevos sistemas energéticos de Europa sean de propiedad pública y estén controlados democráticamente.

Al igual que la Works Progress Administration de Roosevelt, el Green New Deal para Europa creará un nuevo organismo público que pondrá a los ciudadanos al volante de la transición verde de Europa.

En particular, las comunidades de primera línea más afectadas por la crisis climática deben contar con recursos suficientes para corregir la degradación de sus condiciones de vida.

El principio democrático del Green New Deal también se aplica en el lugar de trabajo. Los empleos creados por la inversión verde deben proteger los derechos de los trabajadores y construir un mayor control sobre las empresas para que los trabajadores compartan el valor que crean.

4) GARANTIZAR EL EMPLEO DECENTE

El Green New Deal para Europa proporcionará un trabajo decente a todos aquellos que lo buscan.

Hoy en día, Europa está sumida en una mezcla de desempleo y subempleo. Los empleos precarios van en aumento, y millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus comunidades en busca de empleos que satisfagan sus necesidades básicas.

El Green New Deal invertirá en comunidades de toda Europa para garantizar que la inversión verde cree puestos de trabajo de alta calidad, cualificados y estables que permitan a todos los ciudadanos mantener a sus familias, sin dejar atrás a ninguna comunidad.

Además, asegurará una transición justa para todos los trabajadores de las industrias de altas emisiones, prometiendo empleo seguro, oportunidades de capacitación bien remuneradas y hogares para todos los que los necesiten.

Y el Green New Deal debe reconocer por fin el papel de los cuidados en nuestra economía, garantizando no sólo que se reconozcan y recompensen las tareas domésticas, el cuidado de los niños y el cuidado de las personas mayores, sino también que las actividades que contribuyen a la regeneración de nuestros sistemas naturales desempeñan un papel central en nuestra economía.

5) AUMENTAR EL NIVEL DE VIDA

El Green New Deal para Europa crea prosperidad pública en lugar de riqueza privada, sustituyendo el consumo por lo que realmente importa para las comunidades europeas.

El Green New Deal va mucho más allá de una garantía de empleo. Aumenta el nivel de vida en nuestro continente de muchas maneras, desde inversiones en salud y educación hasta inversiones en arte y cultura.

Mediante la recuperación de las viviendas no utilizadas para uso público, el Green New Deal abordará la crisis de inseguridad en la vivienda que ha dejado a tantas personas sin hogar o en riesgo de desalojo.

Al rediseñar las redes de energía de Europa, modernizar los hogares con un buen aislamiento y proporcionar un transporte público limpio para todos, el Green New Deal reducirá el coste de la vida para todos los hogares. Al revertir la pérdida de biodiversidad y eliminar la contaminación, el Green New Deal permitirá a todas las comunidades disfrutar de aire limpio, agua dulce y reservas naturales locales.

Y al invertir en una economía más sostenible, el Green New Deal reducirá el número de horas que trabajamos cada semana y proporcionará más espacio para la participación de la comunidad.

En el proceso, ayudará a aumentar la resiliencia para las comunidades que se encuentran en la primera línea de las crisis climática y ecológica.

6) REFORZAR LA IGUALDAD

El Green New Deal combate la financiarización y afianza la igualdad en el corazón de Europa.

La desigualdad social y económica sigue siendo demasiado alta, tanto dentro de los países como entre ellos. En las últimas cuatro décadas, la desigualdad de la riqueza ha aumentado drásticamente en los países europeos: el 1% superior captó tanto crecimiento económico como el 50% inferior.

También entre países, el nivel de vida sigue siendo extremadamente desigual, con importantes variaciones en los ingresos, las tasas de desempleo y la contaminación.

Mientras tanto, nuestras sociedades permanecen estratificadas por raza, sexualidad, género, edad y capacidad, creando barreras duraderas para la justicia social y el bienestar colect

El Green New Deal ataca las fuerzas de la desigualdad y construye una nueva sociedad solidaria. Al igual que el New Deal de Roosevelt, el programa revisará el sistema financiero. En lugar de privatizar los beneficios de la transición verde -como ha hecho el Plan Juncker de 2015-, el Green New Deal garantizará que las inversiones públicas generen riqueza pública. Pero a diferencia del New Deal original, el programa se centrará en las barreras sociales, erradicará la discriminación contra las minorías y garantizará que la transición ecológica sea inclusiva para todos.

7) INVERTIR EN EL FUTURO

El Green New Deal es más que un programa de ajuste ambiental. Es una inversión en el futuro de nuestras sociedades y una oportunidad para reimaginarlo.

Reparar nuestro medio ambiente significa desarrollar herramientas radicalmente nuevas: a partir de nuevos modos de transporte público y un almacenamiento en baterías más eficiente, así como prácticas agrícolas que revitalicen nuestro suelo y la silvicultura que reabastezca nuestros bosques.

Por ello, el Green New Deal para Europa incluye una iniciativa de investigación y desarrollo que puede animar a la comunidad científica a desarrollar nuevas e interesantes soluciones para el cambio climático y la degradación del medio ambiente.

Muchos de nuestros mayores avances en tecnología han ocurrido con investigación y financiación del gobierno: desde Internet a las pantallas táctiles, desde los motores de reacción a los cohetes, desde el GPS a los algoritmos de los motores de búsqueda. Pero la forma en que está estructurada nuestra economía significa que mientras el Estado invierte en investigación y asume todo el riesgo, el sector privado cosecha todas las recompensas y casi no paga impuestos sobre sus ganancias.

El Green New Deal debe garantizar que la sociedad se beneficie directamente de las inversiones que realiza en nuevas herramientas, utilizando los ingresos para invertir en más innovación y cumplir con la promesa de disminuir la dependencia social de la semana laboral.

8) ACABAR CON EL DOGMA DEL CRECIMIENTO SIN FIN

Debemos abandonar el crecimiento del PIB como la principal medida de progreso. En su lugar, tenemos que centrarnos en lo que importa.

La obsesión por el crecimiento económico, medido como el aumento del Producto Interno Bruto (PIB), no sólo es un factor principal de las crisis climática y ambiental, que alienta a los países a aplicar políticas económicas temerarias sin tener en cuenta sus costos ambientales y sociales. También es una medida equivocada de nuestro bienestar colectivo.

El Green New Deal debe ir más allá del dogma del crecimiento infinito del PIB y adoptar medidas más holísticas del progreso humano. Igualdad, medio ambiente, felicidad y salud: hay decenas de indicadores que debemos incorporar a nuestra evaluación del progreso de Europa.

El Green New Deal encamina a las instituciones europeas a estimular áreas de mejora social, moral y educativa, a la vez que diseña una economía que privilegia la reproducción social por encima de la producción material. Esto no solo quita presión a nuestro planeta vivo, sino que también hace posible lograr la rápida transición de energía que necesitamos.

9) APOYAR LA JUSTICIA CLIMÁTICA EN TODO EL MUNDO

La crisis ambiental es de alcance mundial y el Green New Deal también debe serlo.

Europa tiene la responsabilidad histórica de liderar este esfuerzo mundial. Durante más de dos siglos, los países europeos han fomentado la contaminación agresiva y la extracción de recursos que han perjudicado directamente a otros países de todo el mundo. El Green New Deal para Europa debe corregir este legado colonial.

Debe redistribuir los recursos para rehabilitar las regiones sobreexplotadas, protegerlas contra el aumento del nivel del mar y garantizar un nivel de vida decente a todos los refugiados climáticos. Y debe garantizar que la transición verde de Europa no se limite a exportar la contaminación a otras partes del mundo, o a confiar en la extracción continua de recursos del Sur Global. La cadena de suministro para la transición energética de Europa debe estar comprometida con los principios de justicia social y medioambiental.

Aun cuando nos enorgullecemos de ayudar al Sur Global, las corporaciones europeas extraen mucho más en pagos de intereses, robo de recursos y arbitraje salarial. Para apoyar una transición verde global, el Green New Deal debe poner fin a estas prácticas económicas explotadoras y, por fin, respetar los derechos de las comunidades de todo el mundo, allanando el camino para la justicia ambiental a nivel global.

10) EL COMPROMISO DE ACTUAR HOY

El Green New Deal no es un marco, un tratado, o un acuerdo. Es un conjunto de acciones concretas que nos llevan rápidamente hacia nuestras metas climáticas y ecológicas.

Incluso si todos los países del mundo cumplieran su compromiso con el Acuerdo de París de 2016, estaríamos en el camino de un calentamiento de tres grados en este siglo y un sufrimiento incalculable como resultado.

Pero ningún país está ni siquiera cerca de cumplir sus promesas. Esto es lo que tenemos después de casi 30 años de negociaciones mundiales en el marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

El Green New Deal nos lleva de las negociaciones a la acción. No es un compromiso político blando para el cambio. No se trata de un trozo de papel firmado por los Estados participantes. No se trata de una reunión multilateral o de la foto de grupo que inevitablemente viene a continuación.

El Green New Deal es un conjunto de medidas específicas y creíbles dirigidas a todos los ámbitos de la sociedad. Se trata de un paquete de medidas específicas que: nos transiciona rápidamente a una economía sostenible, empuja a nuestras democracias a nuevas fronteras, crea prosperidad compartida y construye un mundo más justo más allá de nuestras fronteras.

Nada menos que eso servirá.

La ilustración de cabecera es «Piazza d’Italia» (1913), de Giorgio de Chirico.