Por Sara García Morales, estudiante del máster en ecología marina en la Universidad de Lisboa.
“Por qué es importante el límite de 2°C contra el cambio climático”– Ballena Blanca.
“El límite de temperatura aprobado por el Acuerdo de París no es seguro para los ecosistemas mediterráneos” – El Mundo.
“Un planeta en riesgo de colapso” –El País.
Seguramente ya hayas leído este tipo de titulares pero, ¿sabes realmente qué significa?
Debido a la creciente preocupación por la explotación de los recursos naturales, sumado a los impactos de las actividades antropogénicas en el planeta, Johan Rockström y sus colaboradores escribieron en el año 2009 un artículo publicado en la revista Nature bajo el título: “A safe operating space for humanity”, el cual podemos traducir por “Un espacio operativo seguro para la humanidad”.
El artículo hace referencia a que el único período de estabilidad de la Tierra (la época conocida como Holoceno en la escala de tiempo geológico) podría estar desestabilizándose y dando lugar a una nueva (denominada por algunos autores como Antropoceno) debido a las presiones que el ser humano estaba ejerciendo sobre el planeta. Rockström y colaboradores propusieron lo que se conoce como los límites del planeta o límites planetarios (PB; planetary boundaries), los cuales definen el espacio operativo seguro para el desarrollo de la humanidad con respecto al sistema terrestre, dado que están, a su vez, relacionados con las funciones y procesos biofísicos del planeta.
Destacaron, además, que varios de los subsistemas de la Tierra no sólo no reaccionan de manera lineal, sino que pueden hacerlo de manera abrupta, lo cual hace que sean muy sensibles a los cambios. Es decir, sobrepasar los umbrales propuestos podría derivar en un nuevo estado cuyas consecuencias podrían ser potencialmente desastrosas para el ser humano.
¿Qué procesos identificaron y qué límites establecieron?
En 2009 se identificaron 10 procesos para los cuales se establecerían los límites del planeta. En el año 2015, se actualizó el estudio redefiniendo algunos de dichos procesos, reduciéndose a un total de 9 (ver figura a y Anexo I para una mejor comprensión). De esta manera, combinando la mejora en la comprensión de los mismos junto con el principio de precaución, se pudieron identificar los niveles de perturbaciones antropogénicas por debajo de los cuales el riesgo de desestabilización permanece bajo.
Es importante destacar que, entre el límite planetario (anillo verde) y la zona de incertidumbre existe un buffer o amortiguador que nos permite reaccionar, puesto que estarían apareciendo los “primeros” signos que indicarían que nos aproximamos hacia un cambio abrupto y/o peligroso (nos suena, ¿no?). El estudio apunta que, una vez en la zona de incertidumbre, la probabilidad de sobrepasarla es relativamente baja, sin embargo, es mucho mayor la probabilidad de que haya un cambio en el funcionamiento del sistema terrestre que sea potencialmente devastador para las sociedades humanas.
Los resultados entre ambos estudios muestran que entre 2009 y 2015, tres de esos procesos (cambio climático, pérdida de ozono estratosférico y acidificación oceánica) permanecen igual. En la imagen se puede observar que cinco de ellos han entrado en lo que se conoce como zona de incertidumbre y tres han sobrepasado esta última. Además, el estudio determina que tanto cambio climático como la integridad de la biosfera son la clave de los límites planetarios debido a que son fundamentales para el sistema terrestre.
Personalmente, voy a resaltar la acidificación oceánica (de la que hablaremos más adelante en el blog) para señalar que este proceso está íntimamente ligado a la concentración de CO₂ y, por lo tanto, al cambio climático. Los autores del estudio especifican que no se traspasará el límite de la acidificación si se respetan los niveles establecidos para el CO₂.
Finalmente, el estudio concluye que los límites planetarios no dictan cómo las sociedades deberían actuar, pero es evidente que debemos evitar traspasar las zonas seguras. Desgraciadamente, las sociedades capitalistas no se rigen por lo que es evidente sino por el resultado de las lógicas mercantiles y la lucha entre los intereses de grupos sociales diferentes. De momento, no vamos bien, y es aquí donde debemos actuar: debemos construir un movimiento social capaz de exigir y presionar para que se pongan en práctica urgentemente políticas responsables con el medio ambiente. Políticas agresivas que nos permitan mantenernos dentro de los límites biofísicos seguros el planeta pero socialmente justas, que tengan en cuenta que no todos contribuimos por igual a la superación de dichos límites.
Referencias:
Röckstrom, J. et al. 2009. A safe operating space for humanity. Nature, 461(24): 472 – 475.
Steffen, W. et al. 2015. Planetary boundaries: guiding human development on a changing planet. Science, 347: 736 – 746.
Imagen obtenida de: http://apps1.semarnat.gob.mx/dgeia/informe15/tema/recuadros/recuadro1_2.html
Anexo I. Tabla traducida con las variables de control y sus valores actuales, junto con los límites propuestos y las zonas de incertidumbre
Procesos identificados y actualizados (2015) | Variable control | Límites del planeta (zona de incertidumbre) | Valores actuales sobre la variable control |
Cambio climático | Concentración de CO₂ atmosférico Desequilibrio energético sup. atm | 350 ppm CO₂ (350-450 ppm) + 1.0 W·mˉ² (+ 1.0 – 1.5 W·mˉ²) | 398.5 ppm CO₂ 2.3 W·mˉ² (+ 1.1 – 3.3 W·mˉ²) |
Cambio en la integridad de la biosfera | Diversidad genética: tasa de extinción* | < 10 E/MSY E/MSY = nº de especies/ millón de especies al año | 100-100 E/MSY |
Pérdida de ozono estratosférico | Concentración de O₃ estratosférico, DU | < 5% reducción desde niveles pre-industriales (290 DU; 5 – 10%) | Únicamente transgredido en la Antártida durante la primavera austral (⁓200 DU) |
Flujos biogeoquímicos (interferencias con los ciclos del nitrógeno, N y el fósforo, P) | P global: flujo de P desde aguas dulces al océano P regional: flujo de P desde fertilizantes hasta suelos erosionables N global: industrial y fijación biológica del N (intencional) | 11 Tg P/ año (11-100 Tg P/ año) 6.2 Tg P/ año (6.2 -11.2 Tg P/ año; el límite es global pero la distribución regional es crítica para los impactos) 62 Tg N/ año (62-68 Tg N/ año; la distribución regional es crítica para los impactos) | ⁓ 22 Tg P/ año ⁓ 14 Tg P/ año ⁓ 150 Tg N/ año |
Acidificación oceánica | Concentración del ion carbonato, estado global de saturación media de aragonito de la superficie marina | ≥ 80% del estado de saturación de aragonito pre-industrial media de la sup. marina | ⁓ 84% del estado de saturación de aragonito pre-industrial |
Uso del agua dulce | Global: cantidad máx. de agua dulce para consumo Cuenca: agua dulce retirada como % del caudal mensual medio | Global: 4000 km³/año (4000–6000 km³/año) Cuenca: Meses de bajo caudal: 25% (25–55%); Meses de caudal medio: 30% (30–60%) Meses de caudal alto : 55% (55–85%) | ~ 2600 km³/año |
Cambios en los usos del suelo | Global: área de tierra forestal como % de cobertura forestal original Bioma: área de tierra forestal como % de bosque potencial | Global: 75% (75-54%). Valores = media ponderada de los 3 límites de biomas individuales y sus zonas de incertidumbre Bioma: Tropical: 85% (85–60%) Temperate: 50% (50–30%) Boreal: 85% (85–60%) | 62% ⁓2600 km³/año |
Carga de aerosoles atmosféricos | Global: Aerosol optical death (AOD), gran variación regional Regional: AOD como media estacional en una región. (Monzón asiático como caso de estudio) | Regional: AOD total antropogénico (absorbido y disperso) en el subcontinente indio: 0.25 (0.25-0.50). Absorbido (warming) AOD menos del 10% del AOD total | 0.30 AOD en la región del Sur asiático. |
Introducción de nuevas entidades/organismos vivos | No establecida | No establecida. Observar el límite del ozono estratosférico como ejemplo de nueva entidad (CFCs) | – |