Dentro de la serie de entrevistas a colectivos con creciente participación en las movilizaciones ecologistas, y tras hablar con integrantes de XR, entrevistamos a Marta y a Javier, parte del movimiento de Fridays for Future en Madrid. Fridays for Future es un movimiento internacional que nació en Agosto de 2018, siguiendo el modelo de protesta que comenzó la activista Greta Thunberg frente al parlamento sueco, para denunciar la inacción de los gobiernos en materia de cambio climático. En nuestro territorio convocan sentadas desde principios de 2019, delante del Congreso en Madrid y enfrente de instituciones gubernamentales de otras ciudades, en las que intervienen cada vez más jóvenes que quieren reclamar las medidas necesarias para combatir la crisis climática. Llaman específicamente a la movilización de los jóvenes porque van a ser quienes hereden las consecuencias de que se tomen ahora o no las medidas necesarias para evitar los peores efectos del cambio climático. 

P: Lo primero que os queríamos pedir es si nos podríais explicar la historia de Fridays for Future, primero en un plano internacional y después cómo llega a España. 

R: FFF a nivel internacional surge a raíz de la activista Greta Thunberg. Ya la conocemos, es una activista que  que comienza a manifestarse en la puerta del parlamento de su país alegando que su casa estaba en llamas relacionando esto con la cantidad de incendios forestales que había habido en su zona ese año. Empezó a través de saltarse clase todos los días para poner en el foco la gravedad de la situación y manifestarse contra el cambio climático. Cuando fue creciendo el movimiento se decidió que faltar a clase todos los días era demasiado complicado y se convirtió en una huelga estudiantil los viernes, de dónde sale el nombre Fridays for Future.

El país en el que más fuerza inicial tuvo fue en Australia, después de unas declaraciones bastante insultantes del Primer Ministro respecto a los manifestantes que impulsaron a todavía más jóvenes a salir a la calle. El movimiento empezó a desarrollarse, todo esto fue durante la segunda mitad de 2018 y finalmente a Madrid llegó en febrero de 2019. Surgió a raíz de diferentes asambleas casi espontáneas, pero en el Estado Español ya se había organizado antes en ciudades de Cataluña, la primera Girona, y poco a poco fue expandiéndose por poblaciones más pequeñas y en general por todas las grandes ciudades. Esto fue como un mes antes de la primera movilización masiva que se hizo el 15 de marzo de 2019.

P: ¿Por qué creéis que ha surgido ahora?

R: Por una parte, ha sido esencial para la fuerza del movimiento la presencia de Greta como figura visible, sin ella el movimiento no hubiese tenido la potencia que ha tenido, pero también entran en juego otros factores. Fundamentalmente, la publicación del último informe del IPCC, que da datos todavía más evidentes que los publicados antes, que ya eran muy claros, de que estamos ante una crisis climática y que han acelerado mucho la movilización y la participación de la gente. Ha servido para convencer de que hay que tomar medidas muy importantes para mitigar y combatir los efectos del cambio climático. En este contexto y en coordinación con otros movimientos sociales, surge Fridays for Future.

P: ¿Cómo se desarrolla la relación entre FFF España y el resto de grupos internacionales? ¿Os comunicáis directamente con los FFF de otros territorios, existe alguna organización supranacional?

R: La estructura de Fridays for Future siempre se organiza en base a asambleas locales, desde las que se tiene control y potestad total para que se autogestionen. Los acuerdos de las asambleas de base se trasladan a un nudo de representantes a nivel estatal y desde ahí se adoptan las decisiones que hayan de tomarse a este nivel, siempre respetando los consensos adoptados en Asambleas de base. O sea, las decisiones a nivel estatal no van a contradecir ni modificar lo acordado por las Asambleas de base sino a organizar estas decisiones para la acción estatal. La gestión a nivel internacional también se articula en una coordinadora para la transmisión y difusión de las decisiones de niveles inferiores hacia arriba, pero ésta no participa en a la toma de decisiones vinculantes para el resto de las asambleas. La coordinadora internacional funciona para reunir los consensos de las organizaciones locales y para organizar la acción conjunta. Las decisiones tomadas a este nivel nos sirven de guía y para saber en qué dirección podríamos ir pero no son obligatorias para las asambleas inferiores.

P: Esto nos parece interesante porque creemos que al final es necesario las estrategias de una organización local tienen siempre que tener en cuenta el contexto cercano en el que trabajan.

R: Sí, es súper importante que el trabajo de cada organización local se haga teniendo en cuenta las particularidades y las circunstancias específicas de donde se sitúa. Así podemos medir mejor nuestras fuerzas y ver qué acciones pueden funcionar mejor según el país o la ciudad. Es por eso que desde dentro de Fridays For Future se han impulsado diferentes acciones internacionalmente, ya sean huelgas o manifestaciones u otro tipo de acciones, y que cada asamblea puede escoger qué tácticas aplicar. También por esto hemos podido impulsar movilizaciones distintas a las convocadas a nivel internacional. Esto pasó con la huelga estudiantil mundial del 20 de septiembre que aquí no se convocó para aunar fuerzas con el resto del movimiento ecologista. Decidimos no convocar la huelga el primer viernes para concentrar todos nuestros esfuerzos en las acciones convocadas a nivel nacional para el viernes siguiente, el 27, y también participar en una semana de acciones con más organizaciones ecologistas.

P: ¿Habéis notado muchas diferencias, entonces, entre las organizaciones de Fridays for Future en cada país?

R: Claro que hay muchísimas diferencias. Por una parte hay países que tienen más fuerza en cuanto a capacidad movilizatoria pero cuya fuerza en cuanto a discurso es mucho menor. Por otra parte, aquí hemos tenido la suerte de que existía ya una estructura asamblearia y un tejido de movimientos sociales muy fuerte sobre los que trabajar y eso internacionalmente nos lo han hecho notar. Se puso de manifiesto que aportamos un montón de herramientas para moderar asambleas o para llegar fácilmente a consensos, y se nos felicitó por ello. También existen por supuesto diferencias en nuestras posturas. En el plano ideológico, hemos encontrado cómo las organizaciones de la zona este son más reticentes al anticapitalismo que en países cercanos, a los que solemos ser más afines.

P: Algunos de los comentarios que vimos al principio es que aquí, en comparación con otros países, Fridays for Future parece que no ha conseguido incluir a gente desde el colegio, sino a partir del instituto y sobre todo desde la universidad. ¿A qué creéis que se debe esto?

R: También aquí entran en juego varios factores. El primero es la diferencia del horario en España comparado con otros países Europeos. O sea, aquí no te puedes saltar el instituto si tienes 14 o 15 años a las 12 de la mañana porque es imposible que te dejen, y si lo haces varias veces te van a expulsar. En cambio en otros países esa hora es realmente la hora de comer y los institutos casi han acabado las clases. Además, los horarios en los institutos no son nada flexibles, vas de clase en clase con descansos cortísimos entre medias y no sueles tener tiempo para hacer cosas con tus compañeros fuera de lo relacionado con estudiar. Tampoco te incentivan para nada a que participes en las decisiones que van a afectar al centro. Las asambleas de delegados realmente no suelen funcionar bien y muchas veces no tienes casi comunicación con gente de otros cursos.

Es verdad que aquí nuestros integrantes vienen sobre todo de la universidad pero es porque hemos visto que los espacios de politización para los jóvenes están sobre todo en las universidades. Ahí es donde entras por primera vez en contacto con un tejido asociativo o con el sistema asambleario, y también donde encuentras muchos más espacios comunes o de reunión y esto potencia que se creen este tipo de movimientos. Lo que sí que estamos viendo es cómo gente cada vez más joven se politiza cada vez más rápido. Se nos están uniendo personas de 16 años, que nunca antes había participado en algo parecido, y que en pocos meses adquieren unos niveles súper altos de implicación y de formación política como activistas. En Fridays se nota un montón cómo influye que compartan espacios personas que acaban a empezar a hacer activismo político con otras más veteranas. Entrar con 16 años en una organización en la que vas a compartir responsabilidades con gente experimentada en otros movimientos sociales, que te puede aportar un montón, es súper enriquecedor. Estamos seguros de que por eso hay mucha gente muy joven en FFF que cuando tenga veintipocos años van a ser súper súper potentes.

P: Es verdad que tradicionalmente la poca movilización que ha habido en institutos se ha llevado sobre todo desde las AMPAS o ya a nivel del profesorado. Aquí existen Madres x el Clima y Teachers for Future, ¿sabéis si estas organizaciones tienen también vertiente internacional o si existen análogos suyos en otros países?

R: Creemos que Teachers for Future sí está en contacto con organizaciones similares a nivel internacional pero que sepamos, Madres x el Clima no.

P: Tras las diferentes acciones que se han llevado a cabo desde septiembre y ya súper asentados, ¿cómo se articula vuestra relación y vuestra participación con otras organizaciones del movimiento ecologista?

R: Lo que es la gestión de estas relaciones se hace a través de una Comisión de Relaciones Externas dentro de la organización, y tenemos contacto directo con todas. También creemos que desde el movimiento ecologista, la creación de FFF se ha recibido como un BOOM, como una revitalización del movimiento. El resto de las organizaciones ecologistas llevaban mucho tiempo intentando que se consiguiera lo que han conseguido las movilizaciones de los jóvenes, que es que se incluya la crisis climática en el centro del debate político. Esto es algo que se llevaba luchando desde hace tiempo y que parece que por fin se está dando. En parte por eso, nuestra colaboración está siendo muy cercana y muy fluida. Las últimas movilizaciones se han impulsado y organizado codo con codo con muchas otras organizaciones y desde plataformas muy grandes que incluían desde asociaciones ecologistas hasta sindicatos. Esta lucha, que es tan general y que tiene un impacto tan grande, no puede focalizarse sólo en los esfuerzos de los jóvenes. Aunque empezáramos nosotras y aunque fuese sobre todo la juventud la que se movilizó en 15 de marzo también queremos que quede claro que éste no es un problema que nos afecte solamente a la juventud. Al final tenemos que salir toda la sociedad. Esto forma parte de nuestro discurso y de lo que demandamos, y creemos que se consiguió con las acciones del 27 de septiembre y del 7 de octubre que se convocaron no solo desde Fridays sino junto con las plataformas de Alianza por el Clima, Alianza por la Emergencia Climática y 2020 Rebelión por el Clima. Consideramos que está muy bien que salgamos los jóvenes pero que al final tenemos que salir todas.

P: Desde fuera nos parece que las llamadas a la acción de Fridays se hacen en general desde mensajes esperanzadores y no desde el auto-sacrificio o de alarmas catastrofistas. Aunque el movimiento funcione de manera cohesionada y organizada, obviamente existen diferencias entre cada organización, las hay que tienen visiones de futuro más optimistas o más colapsistas, ¿habéis notado mucho esto a la hora de llevar a cabo acciones conjuntas? 

R: Obviamente existen diferencias en nuestros mensajes y estrategias de comunicación, y también a otros niveles. No todas las organizaciones tenemos las mismas demandas ni objetivos, por una parte XR demanda la descarbonización completa y emisiones cero netas para 2025, mientras que FFF las exige para 2035. A nivel organizativo, también encontramos diferencias porque nosotras somos tejido asambleario puro y duro mientras que ellos se organizan desde la oligocracia. Lo que pasa es que dentro del movimiento ecologista entendemos que nuestros objetivos finales son comunes y que colaborar siempre será positivo para juntar nuestras fuerzas. Puede haber muchas cosas en las que no estemos de acuerdo pero el consenso se encuentra a través de acuerdos de mínimos y lo importante es que las movilizaciones sean un éxito, y lo están siendo.

P: Cada vez sois más conocidos, ¿habéis sentido que la atención que estáis recibiendo tiene parte condescendiente o infantilizadora? Nos referimos tanto a los medios como a gente de otras organizaciones o a integrantes de partidos políticos, con los que puede pasar que te den la razón públicamente, que te digan que sí a todo, mientras realmente trabajan en otras posturas.

R: Creemos que este no ha sido el caso, y que justamente en Fridays hemos sido muy valientes tomando decisiones para que esto no pasase. Cuando la gran mayoría de las organizaciones ecologistas se reunieron con cargos del gobierno en una de las rondas de diálogo con representantes de movimientos sociales, Fridays decidió decir que no. No queríamos entrar a valorar si reunirse con el gobierno era una buena o mala idea pero sobre todo no queríamos que se instrumentalizase con posibles fines electoralistas una lucha tan grande, mucho más grande que personas y gobiernos, y que trasciende el posible gobierno de coalición que se discutía entonces.

Al mismo tiempo, desde los medios de comunicación, nos suelen llegar peticiones muy específicas para que nos represente una chica joven, concienciada y comprometida que pueda emular la figura de Greta. Nos hemos encontrado con peticiones de aparición en medios que eran casi como una lista de la compra. Pedían: una chica, de dieciséis años, que pueda hablar de ciertos temas, etc. Buscan recrear el fenómeno mediático que se ha creado alrededor de Greta, pero aquí no hemos querido que nuestro movimiento tenga únicamente una cara visible. Queremos que sea plural, y para eso contamos con una Asamblea de portavoces que se organizan para rotar en las apariciones de prensa todo lo posible. Si alguna acaba de aparecer en un medio grande, la próxima vez irá otra, y así. Además, en parte creemos que nos ha podido beneficiar que, al contrario de lo que pudiesen esperar los medios de comunicación, nuestras integrantes más jóvenes, como hemos dicho antes, están adquiriendo una formación política enorme, que sobrepasa la media y que sobrepasa los niveles de madurez que se adquieren normalmente en unos pocos meses. Obviamente no se debería responsabilizar a niños de llevar estos discursos y de ponerlos en el foco del debate, pero nos están poniendo en una situación en la que es necesario que empecemos todas a movilizarnos por nuestro futuro porque si no, vemos que nadie lo hace. Entonces a lo mejor buscan a una niña inocente de 16 años que esperas que hable de la importancia de reciclar y termina explicando lo que significa una transición ecosocialista. Esto nos viene bien porque nos sirve para demostrar que aunque nos quieran tratar como a críos, no nos vamos a dejar porque ya no lo somos, porque nos han hecho crecer a base de leches.

P: En cuanto a vuestra estrategia para elegir hacia quiénes dirigís estas demandas y a quién interpeláis en vuestras acciones, tanto a nivel nacional como internacional éstas suelen dirigirse hacia el gobierno y no tanto hacia empresas. Entendemos que esto es una decisión consciente ya que por ejemplo protestáis delante del Congreso, ¿por qué os concentráis ahí y en lugar de delante de determinadas empresas, ya sean Repsol, Cepsa, etc.?  Cuáles creéis que son los puntos fuertes de esta estrategia? 

R: Obviamente creemos que es muy importante apelar a los gobiernos, porque al fin y al cabo son los que deberían estar tomando cartas en el asunto y promoviendo legislación y medidas para combatir el cambio climático. A través de apelar a los gobiernos y de forzarles a adoptar ciertas posiciones también conseguimos llamar la atención de la mayoría de la población, nuestras acciones pretenden llevar el mensaje de que estamos ante una emergencia climática, que esta no es una situación normal.

De todas maneras estamos de acuerdo con que se lleven a cabo acciones en contra o para presionar a las empresas porque entendemos que los responsables de esta crisis son por una parte los gobiernos por su inacción política, pero por otra las empresas y los bancos por poner al capital frente a la vida, una y otra vez. De momento nos hemos centrado en acciones en instituciones políticas porque de alguna forma así es cómo nació nuestro movimiento, pero tenemos previsiones de llevarlas también ante empresas y avanzar también en nuestras estrategias y discurso. Además, también tenemos que diseñar nuestras estrategias para conseguir los objetivos que pretendemos y adaptarlas a lo que funciona aquí. Si creemos de verdad que por hacer sentadas delante de las oficinas de ciertas empresas, éstas van a cambiar realmente sus políticas de emisiones o residuos, ya ni hablemos de sus planes de negocio, vamos a tener que esperar sentados indefinidamente. No lo van a hacer porque lo que buscan es ganar dinero. Los que pueden llegar a cambiar cómo se hace ese dinero y dónde están los límites son los gobiernos, que en teoría nos representan a la sociedad. Ahí creemos que reside la fuerza de manifestarte delante del Parlamento de tu país, para presionar para que ahí dentro se legisle con mucha más fuerza para impedir que estas empresas no hagan lo que hacen.

P: Dentro de estas formas de ejercer presión están, como nos habéis dicho antes, las sentadas delante del Congreso, y aunque en otros países han sido otras, ¿creéis que estas estrategias se adaptan bien a lo que queréis conseguir aquí?

R: Las sentadas han sido una buena forma de lanzarnos y sobre todo de establecer un elemento de reivindicación que se identifique con Fridays pero obviamente pensamos que tenemos que evolucionar desde ahí. Planear las sentadas cada semana, sacar las convocatorias y los carteles, pedir los permisos, estar allí varias horas y trabajar en que participen cada semana más personas para que salgan bien conlleva mucho esfuerzo, que por supuesto desgasta a quiénes las organizamos. Por eso estamos sobre todo en FFF Madrid vamos a centrarnos en seguir sacando convocatorias todos los viernes, pero estas ya no van a ser siempre sentadas sino que queremos hacer también formaciones, a lo mejor asambleas temáticas, u otro tipo de acciones para seguir ejerciendo presión e impulsar nuestras demandas. Esto nos va a ayudar a tener otra perspectiva, ampliar miras y a seguir avanzando.

P: Apelar al gobierno es uno de vuestras estrategias principales y tras todas las repeticiones de elecciones que ha habido últimamente, ¿cómo os planteáis vuestras estrategias según los posibles cambios en las instituciones a largo plazo? 

R: Bueno, obviamente dependiendo de los partidos que lleguen al gobierno entenderemos que se pueden consolidar en algunas medidas o retroceder en ciertas políticas, pero al fin y al cabo nuestras demandas son claras y son las mismas para todos los partidos. Nosotras pedimos una serie de cosas y entendemos que según el partido, puede que sean más fáciles de seguir o menos, dependiendo de sus programas electorales o sus intereses. Al mismo tiempo, tampoco consideramos que el PSOE sea nuestro aliado ni en éste ni en ninguno de los escenarios conocidos. Han gobernado antes y no han hecho lo necesario. Ahora mismo, las políticas en materia medioambiental de todos los partidos en el Estado español son insuficientes y aún las cosas que se firman y acuerdan a nivel estatal muchas veces no se cumplen. De todas maneras, esto no pasa solo con las demandas ecologistas sino que parece que desde el gobierno a veces a muchos sectores de movimientos sociales se les dice que sí como a los tontos para luego no aplican las medidas que prometen, y ahí también tenemos que presionar.

P: ¿Cuáles son vuestros objetivos a corto-largo plazo? En redes hemos visto que estáis impulsando la ECI, la Iniciativa Ciudadana Europea, ¿podéis contarnos un poco de en qué consiste?

R: Nuestras próximas movilizaciones se estructuran sobre todo al rededor de la COP25 y nos queremos también centrar en la planificación para próximas acciones internacionales en 2020. Después de temporadas de movilizaciones muy grandes muy seguidas, tenemos que reorganizar nuestras fuerzas y ver cómo podemos seguir sumando a más gente. A largo plazo, cómo habéis dicho, y sobre todo a nivel internacional, estamos impulsando la Iniciativa Ciudadana Europea, una propuesta que aúna muchas de nuestras demandas de avances en política verde a nivel europeo, como la reducción del 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030 y la descarbonización total en 2035. Esta es una petición que tiene que recoger un millón de firmas antes de 2021 y así poder ser presentada y debatida en el Parlamento Europeo. Estamos haciendo campaña en todos los países en los que tenemos presencia así que animo a quienes lean esto a buscarla y firmarla ya que pensamos que llevarla al Parlamento puede ayudarnos a empezar a hacer avances necesarios para que se afronte también la crisis desde este nivel institucional.

P: No sabemos hasta qué punto es un debate real, porque no han sido comentarios para nada oficiales y todas siguen siendo propuestas, pero hemos visto una supuesta oposición entre el Green New Deal y otras propuestas, como la ECI. ¿Tenéis alguna posición al respecto? 

R: Desde Fridays impulsamos justamente la ECI porque la estamos apoyando a nivel internacional y también porque hemos participado desde que se ha ido formando y desde que se decidió presentar al Parlamento Europeo. Por supuesto, la apoyamos porque incluye muchas de las demandas que tenemos como organización pero también porque creemos que dentro de los actores internacionales grandes, la Unión Europea es uno de los más accesibles para ejercer nuestra influencia y que se cumpla lo que pedimos. El Green New Deal de momento es un proyecto para Estados Unidos y sobre el que, aunque sabemos que ha habido críticas, no tenemos una posición como organización. Nosotras creemos que los planes de transición que se vayan a adoptar deben cumplir como mínimo nuestras demandas, o ser más ambiciosos, y por eso apoyamos la ECI, pero no como un plan que se oponga a otro, sino que se trata de la propuesta que consideramos mejor ahora mismo.

P: Bueno, para terminar, y esta es una pregunta que también le hicimos a Extinction Rebellion en su entrevista, ¿cuáles creéis que han sido vuestras victorias más importantes hasta ahora?

R: Cuando vemos las fotos iniciales de Greta, sola delante del ayuntamiento de su ciudad, y las comparamos con imágenes de las movilizaciones del 27 de septiembre, ya sean de Madrid o de Nueva York, donde por todas partes podías ver a mareas de gente, consideramos que esa es una victoria. El 15 de marzo fuimos 30.000 personas aquí en Madrid, y unos meses más tarde fuimos 150.000, creemos que seguir sumando a tanta gente es súper necesario para ir ganando en la lucha.

La ilustración de cabecera es «The classroom» (2016), de Catherine Lapointe Vollmer.